Ralph Waldo Emerson (1803-1882)

Escritor y filósofo estadounidense. A los 18 años se graduó en la Universidad de Harvard y durante los siguientes tres años dio clases en Boston. Estudió teología en Harvard Divinity School y, en 1829, fue ordenado pastor siguiendo los pasos de su padre. Ese mismo año se casó con Ellen Tucker, quien murió de tuberculosis diecisiete meses después del matrimonio.

     En 1832 dimitió de su cargo pastoral al declarar que había dejado de considerar la comunión como sacramento y no podía continuar administrándola. Luego inició una gira por Europa y en Inglaterra conoció a personalidades literarias como Samuel Taylor Coleridge, William Wordsworth y Thomas Carlyle, con quien comenzó una larga amistad. Regresó a su país en 1833 y se estableció en Concord, Massachusetts. En este tiempo empezó a dar clases en la Universidad de Boston, y sus discursos sobre temas como filosofía de la historia, cultura y época contemporánea, estaban basados en observaciones y notas, que tomaba de sus diarios (publicados póstumamente de 1909 a 1914).

     En 1836 apareció anónimamente su primer libro, Naturaleza, que está considerado su obra más original e importante, y cuya autoría fue reconocida de inmediato. En este texto brinda la esencia del trascendentalismo, una filosofía que busca la armonía entre el hombre y la naturaleza, y su declaración de creyente más detallada. Ensayos (1841) reunió sus conferencias más famosas, entre las que destaca “Autoconfianza”, que se convirtió en la base teórica del individualismo democrático. En esa época escribió para The Dial, el periódico del trascendentalismo de Nueva Inglaterra, que se publicó entre 1840 y 1844. En 1846 apareció su primer libro en versos, Poemas, fechado, sin embargo, en 1847.

     Fue una de las escasas personalidades estadounidenses que se opuso a la guerra expansionista contra México, por considerarla una traición a los ideales fundadores de la república.

     Varios de sus discursos —retratos sobre grandes personajes como Napoleón, Platón o Goethe— se editaron después en Hombres representativos (1850), una obra que recuerda a Héroes (1840) de Carlyle. Su segundo viaje por el extranjero le inspiró un brillante libro titulado Rasgos ingleses (1856).

     A su regreso a Estados Unidos abogó activamente por la acusa abolicionista, y pronunció muchas conferencias en contra de la esclavitud. El sentido de la vida (1869), el primero de sus libros que tuvo un éxito inmediato, incluye los ensayos “Poder”, “Riqueza” y “Cultura”. Aunque a partir de entonces escribió poco y su capacidad intelectual declinó, su reputación como escritor se extendió. Otras obras suyas son Cartas y objetivos sociales (1876) e Historia natural del intelecto (1893). Murió en Concord, el 27 de abril de 1882.

     Del “augusto Emerson”,[1] “aquella águila blanca”[2], uno de los “emperadores” del “pensamiento”, “que son los que ven de alto y en junto”,[3] de “porte imperial, con su paso de cumbres y filosofía de estrella, con el acuerdo imponente de su espíritu puro”,[4]  José Martí escribió que, fue “un Dante amoroso, que vivió sobre la tierra, más que en ella,—por lo que la vio con toda holgura y certidumbre, y escribió Biblia humana”.[5] Su muerte motivó uno de sus más brillantes ensayos,[6] publicado en La Opinión Nacional, de Caracas. Cuatro días después en la Sección constante de este propio diario volvió a consagrarle un breve texto[7] al gran pensador norteamericano, “cuya lectura purifica y exalta”.[8] Véanse, además, los fragmentos publicados en las OC, t. 19, pp. 353-356; y los ensayos “Emerson por Martí”[9] y “Martí, Emerson y la naturaleza”[10] de Mary Cruz y Anne Fountain, respectivamente. Martí tenía entre sus varios proyectos de libros, uno que dedicaría a Emerson,[11] Carlyle, Motley, Longfellow y Walt Whitman. (OC, t. 18, p. 286).

[Tomado de OCEC, t. 9, p. 385. (Nota modificada por el E. del sitio web)].[12]


Notas:

Véase Abreviaturas y siglas

[1] JM: “Caracteres norteamericanos”, La Nación, Buenos Aires, 29 de abril de 1888, OCEC, t. 28, p. 111.

[2] JM: “La originalidad literaria en los Estados Unidos. Louisa May Alcott”, El Economista Americano, Nueva York, marzo de 1888, OCEC, t. 28, p. 143.

[3] JM: “La República Argentina en los Estados Unidos”, La Nación, Buenos Aires, 4 de diciembre de 1887, OCEC, t. 27, p. 34.

[4] JM: “Seis conferencias por Enrique José Varona”, El Economista Americano, Nueva York, enero de 1888, OCEC, t. 28, pp. 41-42.

[5] JM: “Reforma esencial en el programa de las universidades americanas”, La América, Nueva York, enero de 1884, OCEC, t. 19, p. 36.

[6] JM: “Muerte de Emerson”, La Opinión Nacional, Caracas, 19 de mayo de 1882, OCEC, t. 9, pp. 308-339.

[7] JM: “Sección constante”, La Opinión Nacional, Caracas, 23 de mayo de 1882, OCEC, t. 13, pp. 77-78.

[8] JM: “El poeta Walt Whitman”, El Partido Liberal, México, 17 de mayo de 1887, OCEC, t. 25, p. 276.

[9] Mary Cruz: “Emerson por Martí”, Anuario del Centro de Estudios Martianos, La Habana, 1982, no. 5, pp. 78-101.

[10] Anne Fountain: “Martí, Emerson y la naturaleza”, Anuario del Centro de Estudios Martianos, La Habana, 2012, no. 35, pp. 112-125.

[11] En un proyecto de libro titulado “Los momentos supremos: (de mi vida, de La Vida de un Hombre: lo poco que se recuerda, como picos de montaña, de la vida: las horas que cuentan)”, Martí destaca, entre otros episodios de su vida personal, “La tarde de Emerson” (OC, t. 18, p. 288): “cuando pierde el hombre el sentido de sí, y se transfunde en el mundo” (OC, t. 21, p. 387). Y detalla esa experiencia trascendental de la siguiente manera: “Ya he andado bastante por la vida, y probado sus varios manjares. Pues el placer más grande, el único placer absolutamente puro que hasta hoy he gozado fue el de aquella tarde en que desde mi cuarto medio desnudo vi a la ciudad postrada, y entreví lo futuro pensando en Emerson. // Vida de astros. Por lo menos, claridad de astro. A esa impresión se asemejan las que el goce de la amistad me ha producido en grado siempre superior a los que el amor me ha dado, y la emoción en que ha solido dejarme suspenso la voz de algún cantante o la contemplación de un cuadro. Y acariciar cabecitas de niño. Y este es todo el jugo de mi vida, después de treinta años”. (OC, t. 22, p. 323).

[12] Bibliografía:

  • Néstor Ponce de León: “Escritores anglo-americanos. Ralph Waldo Emerson”, Revista Crítica de Ciencias, Arte y Literatura, La Habana, abril de 1868.
  • Enrique J. Varona: “Emerson” (conferencia en el Nuevo Liceo de La Habana, 13 de marzo de 1884), Revista Cubana, La Habana, t. XVI, 1884. (Seis conferencias, Barcelona, Gorgas y Cía., 1887).
  • Alberto Velázquez: “Martí y Emerson”, Gente de la semana, La Habana, 22 de abril y 2 de mayo de 1954.
  • José Ferrer Canales: “Emerson en Martí”, El Nuevo Día, Puerto Rico, 28 de enero de 1994.
  • Anne Fountain: “Autores estadounidenses asumidos por José Martí”, Apóstoles, poetas, bandidos, La Habana, selección y estudio introductorio de Marlene Vázquez Pérez, La Habana, Centro de Estudios Martianos, 2009, pp. 364-400.
  • José Ballón: “El encuentro intelectual de Martí con Emerson en 1880”, Apóstoles, poetas, bandidos, ob. cit., pp. 420-449.