La Alameda. Paseo de Ciudad México. Su fundación data del virreinato de don Luis de Velasco (hijo). En los finales del siglo XIX, se le calculaban unos 1600 árboles y plantas ornamentales. Una fuente principal, con juegos hidráulicos, junto a otras seis fuentes menores completaban su entorno. Fue muy frecuentado durante su estancia en México por José Martí, quien escribió que era “el paseo más bello de la capital, tan hermoso a la luz viva de nuestro ardiente sol de julio, como lleno de aromas fragantes en marzo y en abril”.[1] En carta a Manuel Mercado le confesó: “Porque trabajar, con la hiel al cuello, entre hombres que parecen pezuñas, por el mero pan del día, sin una mano de amigo, sin un retazo de Alameda, sin nadie en quien verterse ni hacer bien,—hasta indigno de hombre es, y cosa que me tiene medio muerto y avergonzado”.[2] Véase el poema “La Alameda” de Fina García Marruz.
[Tomado de OCEC, t. 29, p. 241. (Nota modificada por el E. del sitio web)].
Notas:
Véase Abreviaturas y siglas
[1]JM: “La Exposición Nacional”, Revista Universal. Edición Ilustrada, México, 10 de septiembre de 1876, OCEC, t. 2, p. 246.
[2]JM: “Carta a Manuel Mercado”, [Nueva York, 22 de marzo de 1886], OCEC, t. 23, p. 180. (Las cursivas son del E. del sitio web).