A CARMEN MANTILLA MIYARES

Carmita hija:

Todavía un abrazo, de este lado del mar, antes de irme lejos. ¿Y tu alma, que no corre más peligro que el de ser demasiado piadosa? Que te gane, a vida útil, el caballero que te haya de merecer. Si no, no. Quien quiere, gana. Quien no se esfuerza, no quiere. La esposa, cargada del santo hijo, necesita apoyarse en el esposo creador. En la vida de dos no hay ventura sino cuando no se lleva demasiada ventaja, o resalta con demasiada diferencia, uno de los dos. Tú eres honrada, laboriosa, compasiva, sencilla, enérgica. No podrás querer sino a quien sea como tú: honrado, laborioso, compasivo, sencillo, enérgico. Yo creo en tu felicidad, porque tú tienes razón sólida. La bondad es la felicidad, cuando no se la exagera, como yo la exageré. Los chinos dicen que en nada debe haber exageración: ni en las virtudes.—La dignidad de un hombre es su independencia: y la de una mujer se mide por los esfuerzos que inspira para conquistarla.[1] Tú piensa en mí, y en esto, aunque por tu vida no has de temer, si vivo yo, porque mientras tenga yo brazos, ahí tienes tú tu nido.

     Adiós. Ve como, al poner otra vez el pie en la mar, pienso en ti. Para ti como para María es la carta larga. Anímate y ayúdenle la vida a tu madre amada. Estudia y pon la escuela, y desde el verano prepárala bien, que es modo de vivir fácil y decoroso. Dile al buen Soto mi confianza en que, por su voluntad propia, sabrá demostrar que vale más de lo que los suyos suponen, y que la energía de su decoro iguala en él la claridad de su inteligencia y la bondad de su alma. Que se ponga en pie, y luzca en un año. Que aprenda y […][2] prenda […] Que imagine […] el mundo, a ti en peligro, y a él salvándote con la fuerza de sus brazos. Que inspire respeto, como a ti y a mí nos inspira cariño.[3]—Y adiós la hija. ¡Quién sabe hasta cuando!

                                                             Tu

Martí

[Cabo Haitiano] 9 de abril [de 1895]

Tomado de José Martí: Epistolario, compilación, ordenación cronológica y notas de Luis García Pascual y Enrique H. Moreno Plá; prólogo de Juan Marinello, La Habana, Centro de Estudios Martianos y Editorial de Ciencias Sociales, 1993, t. V, p. 150.


Notas:

Véase Abreviaturas y siglas

[1] Nótese la similitud temática con las cartas a su hermana Amelia de 1880 (OCEC, t. 6, pp. 226-228) y a María Mantilla de 9 de abril de 1895 (TEC, pp. 59-69). (N. del E. del sitio web).

[2] Roto el manuscrito.

[3] Véase, al respecto, la carta de Carmen Miyares a Martí, de 18 de febrero de 1895, DJM, pp. 442-443. (N. del E. del sitio web).