Francisco de Lersundi y Ormachea (1817-1874)
General español nacido en Valencia y muerto en Bayona. Se distinguió en los años de la primera guerra carlista (1833-1839) y sirvió a la causa liberal. En 1852 era ya general. Al año siguiente se le confió la formación del gobierno, que luego presidió, reservándose además la cartera de Guerra.
En mayo de 1866 sucedió a Domingo Dulce y Garay como capitán general de Cuba —cargo que ocupó hasta noviembre de ese año— y ejerció una política contrastante con su antecesor, pues se destacó por cerrarle el paso a los reformistas y su rechazo a lo cubano. Regresó al puesto en diciembre de 1867 y fue relevado por Dulce en enero de 1869. Durante esta segunda etapa, manejó la posibilidad de un empréstito con Estados Unidos ofreciendo en garantía las rentas y propiedades de Cuba; dio facultad a las Comisiones Militares para juzgar los delitos de robo, asesinato e incendio; y fue muy criticado por su participación en el comercio ilegal de esclavos y otras prácticas de corrupción administrativa.
Tras el estallido del 10 de octubre de 1868 dio a la publicidad un bando, el 20 de octubre, que declaraba la guerra a muerte contra los insurrectos, ya que daba amplios poderes represivos a los jefes militares y ordenaba a las Comisiones Militares que juzgasen severamente los delitos de traición, sedición y rebeldía. Enemigo de la revolución septembrina en la Península, insistió en deponer su cargo. A su regreso a España, conspiró en 1872 para proclamar en el trono a Alfonso, el hijo de Isabel II.
(Tomado de OCEC, t. 1, pp. 303-304).
Véase Abreviaturas y siglas
